Ya sea que transmita el agudo silbido de un
motor a reacción o las suaves melodías de un popular cantante, cualquier onda
sonora tiene como fuente un objeto que vibra. Los instrumentos musicales
producen sonidos de diversas maneras. Por ejemplo, el sonido de un clarinete
procede de una lengüeta que vibra, el sonido de un piano de cuerdas que vibran
y el sonido de un cantante de cuerdas vocales que hacen lo mismo.
Las
ondas sonoras son ondas longitudinales que se propagan en un medio, como el
aire, por ejemplo. Para investigar cómo se producen las ondas sonoras
enfocaremos nuestra atención en el diapasón, un dispositivo común para producir
notas musicales puras. Un diapasón consiste en dos puntas o dientes metálicos
que vibran cuando se les golpea. Su vibración perturba el aire próximo a ellos,
como se muestra en la figura 1 (en esta figura se ha exagerado notablemente
la amplitud de la vibración del diente para mayor claridad.) Cuando un diente
se balancea hacia la derecha, como en la figura 1 a, las moléculas de aire
que están en frente a su movimiento se ven obligadas a acercarse más de lo
normal. Este tipo de región de alta densidad molecular y alta presión de aire
se conoce como una compresión o condensación. Esta compresión se aleja del
diapasón como una ondulación en un estanque. Cuando el diente se balancea hacia
la izquierda, como en la figura 1 b, las moléculas que están a la derecha del
diente se separan y la densidad y a presión del aire en esta región son
entonces menores que lo normal. Está clase de región de densidad inferior a la
normal recibe el nombre de rarefacción. Las moléculas que están a la derecha de
la rarefacción en la figura se desplazan hacia la izquierda. Por tanto la
rarefacción misma avanza hacia la derecha para seguir a la compresión ya
producida.
Al continuar la vibración del diapasón, se
forma una serie de condensaciones y rarefacciones sucesivas que se propagan a
partir de aquél. El patrón que se crea en el aire es algo parecido a lo que se
representa en la figura 2 a. Podemos utilizar una curva sinusoidal para
representar una onda sonora, como en la figura 2 b. Obsérvese que hay
crestas en la onda sinusoidal en los puntos donde la onda sonora tiene
condensaciones y valles donde la misma tiene rarefacciones. El movimiento
molecular de las ondas sonoras se superpone al movimiento térmico aleatorio de
los átomos y moléculas.
Serway - Faughn, Física, Quinta edición.
Serway - Jewtt, Física para ciencias e ingeniería, Volumen 1, Septima edición.
Libro lonk: http://www.cec.uchile.cl/~vicente.oyanedel/libros/serway.pdf
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